El tratamiento del VIH no sólo se resume en tomar cócteles de fármacos antirretrovirales y hacerse pruebas.
Varios estudios muestran que algunos factores sociales y psicológicos contribuyen de forma destacada en la mejora de la calidad de vida de las personas que viven con el VIH, pueden tener una influencia considerable sobre la eficacia del tratamiento y la progresión de la infección por VIH.
Joan Tincopa Langle, investigadora epidemióloga y miembro de la Pastoral de Salud de la Comunidad Ecuménica El Camino, en una entrevista al programa «Rompiendo Esquemas», manifestó que el acompañamiento emocional y espiritual a las personas con VIH, es fundamental para eliminar la culpabilidad y pensamientos negativos en las personas que recién son diagnósticadas.
Indica además, que la espiritualidad tiene que ver con la fe que le ponga la persona a las acciones que pueda realizar, la cual tiene que ver con la creencia de un Dios, cualquiera sea la posición religiosa que se tenga.
Entre otros aspectos, estos factores incluyen la dieta, el estado físico y psicológico, la situación profesional, el contexto familiar, las relaciones amistosas y sentimentales, que se trabajarán para mejorar el bienestar general, afirma.
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Definitivamente un tema complejo. Un factor importante es la educación. Que sucede con personas que no la tienen? Esas personas no sabrán utilizar su automanejo, sus pensamientos, sus creencias religiosas; entre muchas otras herramientas a utilizar. Como por ejemplo el poder de la mente. El ser humano, de por sí, es un mundo, y cada uno de nosotros lo somos. Entonces que hacer?. La información es importante. La comunicación tiene que ser fluida. En fin, la ayuda debe ser completa, no basta con orientar. Y ello hasta la fecha no se logra aún. Felicitaciones a la Ingeniera Joan Tincopa.